Fue de mi cielo, única estrella
Robada de la noche por cupido
Del averno única flor fue ella
Un todo del imposible herido
Llevaba en una de sus manos
Un arma por años deteriorada
Un triste lamento en la mirada
Hizo que la deseara en vano
Con flecha esquiva, mas aun certera
Tensó al aire palabras sufridas
Anclando deseo a nuestras vidas
Que ahogaron efímera espera
Fuiste del cuerpo aliento de vida
De mi poesía eras la elegida
De mi alma fuiste viva amada
Y hoy de mis días… de mis días…
..Eres nada.